La muerte llega al ranchito

Much@s ya sabéis que tengo hecho un trato con este hombre que conduce el tractor, mi amigo José, atiende el viñedo de mi parcela durante todo el año y cosecha las uvas que luego vende a la cooperativa del vino, es un trato que me parece muy justo, el recibe una justa, aunque a veces no tan justa compensación por su trabajo y yo sin gastar un dinero que no tengo, me doy el gusto de ver la parcela perfectamente atendida todo el año, ese es el trato, la tierra para quién la trabaja, como debe ser.

Desde mi ventana vi que José me hacia señas, el llevaba rato trabajando, pero conoce mis costumbres de noctámbulo y si me tiene que decir algo, siempre espera hasta que me ve moviéndome dentro del ranchito, nunca llama a la puerta para no despertarme y rara vez me hace señas o me llama, así que sus gestos llamaron enseguida mi atención y salí para ver que queria, un poco intrigado, la verdad.
-¿Has visto tu conejo? me dice
-Pues no, hace dias que no lo veo
-Pues miralo, ahí lo tienes muerto, acaba de caer fulminado
-¿Como que fulminado?
-Es que no te enteras de nada Genín ¿No has oído hablar de un virus que está diezmando los conejos? es "La Neumonia Vírica Hemorragia", llega un momento en que se ponen a dar vueltas en redondo y caen fulminados, solo se les ve apenas unas gotitas de sangre en la nariz.
-¡No jodas! y eché a correr para ver al conejo que yacia en mi césped.

Efectivamente, ahí estaba el pobre, tieso, pero enseguida respiré aliviado, estaba en mi césped, pero el muerto era un conejo salvaje y el "mio" era doméstico y mas grande, no tiene la colita y el culito blancos como este, que es la carácteristica de los conejos de la zona, en fin que no se parecía en nada...

Se lo dije a José que me dio la razón al tiempo que me decía que eran varios conejos los que vivían debajo del ranchito  y que debería  poner trampas para cazarlos y zámparmelos, enseguida se percato de la cara de mala leche que puse y conociéndome,  salió zumbando a seguir arando con su tractor. Por cierto,  ese tractor se parece mucho al tuyo Mariajesús...

Yo me quedé algo mustio reflexionando si la de la guadaña seria la misma para animales que para hombres y que no me hacia ni puñetera gracia que hubiera visitado el ranchito, y es que entre vosotr@s y yo, no me apetece en absoluto palmar ahora...jajaja