¿A quien se lo pido?...

En medio de la alegría de estas fiestas, vi miradas que me conmovieron, que me atraparon, eran de ellos, los viejos, unas tristes, otras de impotencia, de temor, de soledad, de incomprensión,también las había altivas e incluso desafiantes, estas me gustaron y me atraparon y no podía apartar mi vista de esas miradas rogando en mi interior que sus familiares y amigos los comprendieran, que como yo, se dieran cuenta de sus miradas, que les dieran lo que tanto necesitan, respeto, reconocimiento, compañía y cariño, porque queridas amigas y amigos, cuando se llega a viejo, no todos tienen mi suerte de vivir razonablemente felices, sanos, libres, al menos así estoy por ahora, aunque siempre hay cosillas claro, quien no las tiene, pero desgraciadamente, demasiados sufren y están abandonados, solos o enfermos, viviendo muchos de miseras pensiones, o en la indigencia.

Estas lineas sin pretensiones y esta bella canción va por ellos, que tengan esperanza, acabo de escuchar que los teléfonos móviles (Celulares) producen unas "ondas" que ayudan a prevenir el Alzheimer, a lo mejor es verdad y suena la gaita, siempre hay una esperanza, ¡la vida es bella!, nosotros la podemos hacer así, llena de luz o sombría, que sepan que hay quien se acuerda que un día fueron jóvenes con una vida por delante y que a todos se nos acaba, que sea dignamente, por favor, que no sientan que son un estorbo, no permitamos que mueran sintiéndose malqueridos y abandonados o incomprendidos, que los acusen con sorna de que ya están contando batallitas, si supieran como jode eso... lo pido respetuosamente, pero... ¿A quien?

Mucho animo para la gente veterana, debemos recordar todos que la dignidad, ante todo!
No consentir que nadie nos ningunee, nos merecemos un respeto,¡ a vivir con un par!. Me prometí a mi mismo cuando vi aquel grupo de ancianos tristes frente a mi alegría y vitalidad, que les haría este ínfimo homenaje recordándolos, y ya me quedé tranquilo, es lo que iba a publicar cuando falleció Sandro, que descanse en paz.
Y recordar que a todo cerdo le llega su San Martín...jajajaja
¡ SALUD !